Friday, November 03, 2006

Back to Pucela

Con la moral bajo tierra tras el adiós de Gala volví ayer de nuevo a la ciudad de la que nunca debí salir hace cosa de tres o cuatro meses. El motivo, para ver si me aprueban de una vez por todas las notas de gastos que me adeudan de mi periplo levantino de un tiempo a esta parte.
Iba con la intención de hacer más cosas que vistar mi antigua oficina pero al final no pudo ser y me quedé sin ver al amigo Law ni a la italiana que ahora ocupa mi cama en mi antigua casa pucelana.
Ayer fue un día de esos en los que las cosas no pueden salir mal simplemente por el hecho de que peor que el día anterior es imposible que salgan las cosas. Para empezar tenía que ir a recoger unos billetes que la empresa me ha pagado para mi próximo desplazamiento a Valencia. Estaba la ciudad imposible para aparcar por lo que opto por dejarlo en zona azul. Inserto una moneda de euro en la maquina y me dice que eso es mucho, así que como no tenía ninguna monedita más pequeña... me voy y dejo el coche sin ticket. En otra circunstancia cuando hubiera llegado al coche de nuevo hubiera tenido una multa, pero ésta vez la cosa no podía ir mal y a pesar de que la señora vigilanta de la ora pasó por delante del coche... no le puso multa. Y para colmo de males mi empresa me ha pagado billetes de clase preferente hasta Madrid y vuelo con Iberia entre Madrid y Valencia que cuesta la friolera de 414 euros. Más que cuando fui el año pasado a Amsterdam. En fin, que para eso paga la empresa.
El día en pucela fue un continuo comentar con los compañeros la nueva situación y el nivel de hartura que tengo ya del nuevo trabajo. La verdad es que me he pasado el día de cotilleo en vez de hacer lo que tenía que hacer... y por eso me dieron las ocho de la tarde y ahí seguía en la oficina de charla...
Al salir, y como no tenía mucha prisa decidí darme una vuelta por pucela en mi coche... y aprovechando que habían abierto al tráfico la plaza circular me fui por ahí hasta mi casa... pero mi gozo en un pozo porque la calle por la que iba aún seguia cortada. Me metí por una calle que no habia ido nunca y sin comerlo ni beberlo aparecí en casa de srta L (no subí) y desde allí ya me ubiqué y fuí hasta lo que fué mi calle hasta hace no mucho. Me vinieron a la mente buenos momentos que he pasado allí, con las chungaras, con mi vecino davi, con el axe, con al, con goph... Sí, echo de menos pucela y pucela me echa de menos a mí aunque no lo diga. ¿Qué es lo que realmente echo de menos de pucela? simplemente la vida que llevaba hace un año, los compañeros de trabajo, los tendancers, otro ritmo de vida, MI ritmo de vida, el hecho de que Palencia estuviera tan cerca, srta L, las TiM, y seguramente muchas cosas más que se me olviden que son pequeños detalles pero que son lo suficientemente importantes como para echarlos de menos.
Volvería de nuevo a pucela por otros quince meses y luego otros quince más, así hasta que no quedara nada ni nadie que me hiciera volver... pero de momento tengo que conformarme con Fuenlabrada, una ciudad donde la única persona que conozco ya me está empezando a caer mal.
En otro orden de cosas hay que comentar que este puente que hay en Valencia lo ha aprovechado la susodicha valenciana para visitar mi ciudad... con su novio. El caso es que el otro dia se fue de la lengua y me dijo que iba a venir... pero yo no le dije "ah, pues si vas me llamas" porque realmente lo que le dije fue "no estaré porque el jueves me voy a pucela, el viernes a Palencia y el sábado a Salamanca". Así que espero que no se le ocurra ni llamar... ni mucho menos si me la encuentro en la calle, saludarme.
Lo siento pero ahora toca el modo "hombre inaccesible" que rebautizó ella al modo teflón. Una vez más la culpa no es mía así que no me pidan responsabilidades... que yo no las tengo.

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